Utilizando la semilla de tamarindo científicos de del Instituto de Investigaciones en Materiales (IIM) de la UNAM descubrieron un metodo para conseguir crear una espuma biodegradable que podría sustituir al poliestireno expandido o unicel, material plástico espumado, derivado del poliestireno.
10 septiembre 2017 | Publicado : 10 sep 2017 - 04:36 | Actualizado: 10 sep 2017 - 04:51
“El unicel, que se utiliza en la elaboración de vasos y platos desechables, entre otros objetos, tarda cientos de años en biodegradarse; en cambio, nuestra creación no ocuparía mucho tiempo en los depósitos de basura, pues a la intemperie hongos y bacterias tardarían entre dos y tres meses en comérsela. Como resultado, se generarían agua y dióxido de carbono, pero no lixiviados (líquidos resultantes de un proceso de percolación de un fluido a través de un sólido) que al llegar a los mantos freáticos contaminan las aguas”, aclaró Maciel.
El también académico agregó que “en la industria alimenticia las semillas de tamarindo son un desecho y podrían usarse para generar este componente; además con su producción se pueden obtener vasos y platos desechables biodegradables”.
Y detalló que con ello, sería posible la sustitución de la dependencia del petróleo, que podría derivar en la resolución del problema de contaminación con polímeros no degradables en el corto plazo. En palabras retomadas por Notimex, el científico comentó que para crear el proceso de laboratorio para la utilización de este insumo, realizaron una investigación durante tres años, para injertar químicamente la semilla del tamarindo en un polímero flexible similar al hule, el poliacrilato de etilo.
Refirió que aun cuando dicha investigación está en una etapa de desarrollo, los científicos mantienen esta innovación bajo registro de patente, aunado a que trabajan en el diseño de una planta piloto para producir este material en gran escala.
Nuestra Visión
Si se los compara con otros biomas, los humedales hacen una contribución significativamente alta a la biodiversidad mundial. Sin embargo, la tasa de pérdida y deterioro de los humedales se está acelerando en muchas regiones del mundo. Las acciones para la conservación y uso racional de los humedales pueden hacer una contribución significativa a la conservación de la biodiversidad, al desarrollo sostenible y la mitigación de la pobreza, mediante la salvaguarda de las especies que dependen de los humedales, de recursos hídricos de mucho valor, y de otros productos y servicios de los humedales.
Creemos que el bienestar espiritual, físico, cultural y económico de la gente depende de la salvaguarda y restauración de los humedales a nivel mundial. Consideramos que se le debe otorgar una mayor preeminencia a su conservación y uso racional como una contribución al desarrollo sostenible. Son necesarias una mejor gobernanza y acciones concertadas por parte de todos los sectores sociales, desde el nivel mundial al local, para mantener los humedales y su variedad de valores y servicios, para las generaciones presentes y futuras.
Nuestra visión a largo plazo es que los humedales y los recursos hídricos se conservan y gestionan teniendo en cuenta toda la gama de sus valores y servicios, para beneficio de la biodiversidad y del bienestar humano.
Valores básicos
En el trabajo a través de todas nuestras oficinas y con nuestros asociados mantenemos los siguientes valores básicos:
Nuestro trabajo tiene validez a nivel mundial
Nuestro trabajo tiene sólidas bases científicas e incorpora el conocimiento tradicional
Trabajamos mediante asociaciones y con una amplia gama de distintos sectores
Respetamos los valores tradicionales
Trabajamos de manera transparente y rendimos cuenta de lo que hacemos.
Julio Montes de Oca, Jefe de la Oficina Regional en Panamá