Lo primero que verán los usuarios es un renovado menú de inicio en la barra de tareas. El botón de Inicio ahora se encuentra por defecto en la parte central del escritorio, y no en la esquina inferior izquierda, como lo hacía antes, aspecto que ya se conocía por las filtraciones.
Asimismo, el menú de inicio elimina los Live Tiles, introducidos con Windows 8, para mayor comodidad del usuario. Las esquinas han sido redondeadas y las aplicaciones recientes y archivos recomendados estarán en una cuadrícula.
El nuevo Windows también ve el regreso de los widgets (también llamados gadgets o sidebars) que fueron eliminados en Windows 8. La nueva versión de estos viejos componentes utiliza inteligencia artificial para ofrecer contenido personalizado al usuario.
Cambio radical en el modelo de negocios de la Store
Uno de los cambios más positivos, al menos para los desarrolladores, es el relacionado con la Microsoft Store, que ahora tendrá un aspecto similar a otras tiendas de aplicaciones.
"Ahora existe la posibilidad de que los desarrolladores que venden u ofrecen aplicaciones a través de la Microsoft Store puedan traer e integrar su propio sistema de eCommerce y quedarse con el 100% de las ganancias generadas", de acuerdo con Aaron Woodman, gerente general de Windows, citado por Forbes.
Esto representa un cambio radical en la industria, especialmente tras las críticas que enfrenta Apple y su AppStore, que ha sido acusada de tener conductas monopólicas y se encuentra en el punto de mira de un grupo de legisladores en EEUU.
Otra importante actualización dentro de la tienda es que soportará aplicaciones de Android, que serán accesibles desde la barra de tareas.
Microsoft retoma la enumeración de sus sistemas operativos
El anuncio de un nuevo Windows 11 sorprendió a muchos, ya que desde 2015 la empresa había anunciado que Windows 10 sería la última versión. Desde la compañía explicaban que la idea era tener un sistema en constante evolución que mejoraría de forma constante, lo que haría innecesario un nuevo número.
No obstante, Woodman aclaró que la decisión de presentar un Windows 11 se debe a que esta actualización le permitirá al consumidor tener una mayor claridad sobre la versión con la que está trabajando, además de ser un claro mensaje de que la empresa continuará innovando.