El vertido de petróleo, que desde finales de agosto afecta a la costa de Brasil, ya ha dañado más de 650 playas, según un recuento del Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama).
19 noviembre 2019 |
Las autoridades locales hace días que pusieron en marcha un plan preventivo que ha movilizado a 200 personas de 25 municipios, a la espera del petróleo que pueda llegar.
Casi dos meses después del inicio del vertido, el origen sigue siendo incierto: El Gobierno brasileño acusó al barco griego Bouboulinha, propiedad de la empresa Delta Tankers, pero éste negó su responsabilidad en el vertido y se mostró dispuesto a aportar pruebas y a colaborar con las investigaciones.