"Además, halló la existencia de las conexiones entre neuronas, a las que denominó espinas, poco después denominadas sinapsis", recuerda la Facultad de Medicina.
El control de mando y el dolor
Los órganos que se lesionan no producen dolor en sí mismos: lo que lo registra son las terminales nerviosas que los envuelven. En el caso del cerebro pasa lo mismo: no duele por sí mismo, sino que las terminales nerviosas de los vasos sanguíneos son las que captan el dolor en caso de una lesión o pulsión en la cabeza.
El alcoholismo
Las personas que padecen alcoholismo pueden registrar efectos neurológicos que desarrollen enfermedades como el delirium tremens, un síndrome de abstinencia con alucinaciones, crisis de pánico y agitación, además de padecimientos que incluso pueden transformar la morfología cerebral.
La dieta y la inteligencia
"Algunos estudios señalan que una dieta balanceada, rica en todos los nutrientes necesarios, como carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales, está directamente relacionada con una inteligencia poco más elevada que en los casos cuyas dietas son desbalanceadas", apunta la UNAM.