El estado Táchira se convirtió desde hace dos semanas en punto de tensión, después de que la oposición anunció que por allí ingresarían varios camiones con cargamentos de medicamentos donados por Estados Unidos, insumos que para los habitantes del lugar deberían llevarse al centro del país.
10 febrero 2019 |
Pero la prohibición del tránsito de autos no impide que colombianos y venezolanos crucen a diario estos caminos para trabajar, estudiar, vivir, hacer compras o visitar a familiares y amigos, entre las 6.00 y las 21.00 (10.00 y 2.00 GMT).
De acuerdo con lo establecido por las autoridades de ambos países, los ciudadanos que crucen por cualquiera de los puentes habilitados pueden llevar compras mínimas para el consumo básico de las familias.
Sin embargo, es frecuente ver transitar por trochas que están a la vista de las autoridades y ubicadas debajo de los puentes Simón Bolívar, de San Antonio, y Francisco de Paula de Ureña a personas con carretas, bolsos, cestas con frutas y verduras.
De esta forma irregular cruzan personas sin documentos o con productos que no están autorizados por la aduana y de ser "vistos" por las autoridades pueden ser incautados, o si trasladan mercancías ilícitas, detenidos.
Por el puente Simón Bolívar a diario cruzan más de 30.000 personas, de acuerdo con información aportada por efectivos militares venezolanos, de los cuales no regresan a Venezuela unos 3.000 a 4.000 personas diariamente.